quien ríe último...

increíblemente justo
justo en lo contrario
me pega una palmadita en la espalda y se ríe tanto de mí
aunque no signifique nada
se caga de la risa
fuerte
y en medio de mi cara.

siempre me han caído bien los que se ríen.

vos.

vos sabés
de alguna oculta manera, lo sabés todo.

y si hablara en argentino, quizás sabrías más. Si habláramos argentino, si estuviésemos allá -por suerte no lo estamos, sería todo tan distinto-, si estuviésemos allá sabrías tanto, quizás todo, todo eso que ahora crees que sabes, pero no sabes, no sabes nada, ya no sabes nada de mí ni de lo que me rodea, ya no te sabes mi olor, pues lo he cambiado -te informo-, he cambiado algunas palabras; hasta tengo el pelo de otro color y de otro largo. Mi cara ha cambiado, ésa cara que recuerdas ya vagamente existe -para tí, claro-, ahora todo se incluye dentro de otro marco, y tú no formas parte de él, por más que te disculpes, por más que me digas que lo sientes, por más que digas que me amaste hasta que no pudiste ver todo ése daño, ahí mismo, debajo de todo ese gran tú que gritas haber olvidado, ahí sigue todo, igual, mentira sobre mentira, escalón sobre escalón, nada ha cambiado realmente.

yo ya no sé

ya no sé nada
me gustaría saberlo todo pero yo no sé nada. nada de nada, mientras más trato de saber menos sé y me carga pero a la vez me gusta un poco.
estás loco, pero igual me caes bien -¿me caes bien?- ¡qué carajo es eso!
me caes bien pero estás loco, quizás demasiado loco te encanta que te diga que estás loco porque te ríes mucho y te sientes orgulloso mientras te sigues riendo y me dices cosas locas mientras seguimos caminando por la calle y yo te digo y tú me dices y nos decimos siempre puras cosas que tienen poco o nada de sentido pero me sigue gustando, me sigues gustando cuando miras con esa cara de loco y yo te miro con cara de que no sé que decir, la verdad es que siempre sé que decir pero no me atrevo, y yo me hago la loca y me río y te digo cualquier otra tontera y mejor no digo nada más porque qué tanto, si después igual nos vamos a hacer los locos y no nos vamos a decir nada y nos vamos a ir lejos y me vas a seguir diciendo cosas locas y yo voy a seguir haciéndome la loca como si nada pasara pero todo pasa y qué tanto si todo pasa, cual es el maldito problema que soy cuatica que estás loco que estamos demasiado locos cuando todo pasa y que no pasa nada y que me encierras y que te encierro y nos reímos y nos seguimos riendo como una música zonza que se repite y se repite siempre en el mismo loop y no para, no para, no para.
ésa música no diría nada pero esa nada al final se transformaría en todo porque así es la vida así son las cosas y así soy yo me gustaría cantarte todas ésas canciones que rondan en mi cabeza como moscas que molestan me gustaría decirte que los espacios no son tan necesarios que así como las comas pueden evitarse y que eso a mí tampoco me importara tanto que no me importara nada que estuviésemos locos que estuviésemos realmente zafados o que fuéramos una lata o que nos fuéramos de aquí

así cuando dices no importa todo me importa más.

y
-yo ya no sé-

el viernes hice un dibujo

y nunca fuiste tú, probablemente.
era el que vendía sombreritos y antifaces para las doce
ahí, con todo ése sol encima, en el semáforo en rojo
claro que nunca fuiste tú, de dónde habré sacado eso, digo yo. ¿no?

ayer me comí un yogurt que tenía una frambuesa deslavada y fláccida.
me dió un poquito de asco pero me dio más lata pararme a botarla
así que cerré los ojos y me la comí igual, como si fuera un durazno, o qué-se-yo

y si pudiera extender las pelotudeces como un tejido
apuesto que este invierno hubiese sido harto más calientito.

cha-chán.

de actualización en actualización

la renovación constante, el pensar que estás ahí todo el tiempo pero la verdad (de la milanesa) es que no podrías estar más lejos, más en otro lugar

como una vez que estuve enamorada y escribí una cosa con título y todo (cito-transcribo-textual):

treinta y uno de diciembre

ayer te ví, en una esquina, fumando un cigarro
estabas ahí, en la calle vacía, como si estuvieses esperándome

pero no eras tú
y sí eras todo tú

fumando, me miraste, largo rato
como en una película nórdica

y yo te miré


pero no eras tú-

--
y así pasó efectivamente, tal cual, podría dibujar esa esquina en mi cabeza en este momento. Y no era él. Tal cual como ahora, que soy yo, pero no estoy ahí.

y así con la cosa.

el frío de Junio

Ya estamos casi de invierno, lo más lanudo y melancólico a mano en el closet.

La manera absurda de imitación hacia patrones ya establecidos.

No quiero borrar, sólo tapar con cosas, como cuando uno entierra algo para no verlo, o guardarlo, pero siempre sabes que está ahí, debajo de toda esa tierra, no que se fue, y ya no se verá más.
Si, tengo que reconocer la angustia, (por diferentes motivos, claro) tengo también que reirme por reconocerlo en este medio, estimado y gran no-lector-virtual. Reírme de la paradoja, reírme de que casi estoy reconociendo todo, empelotándome al frente de todos éstos desconocidos, entre los cuales, siempre-aparece-un-conocido.

pueblo chico (o chino?) infierno grande, inentendible y gran océano gigante, de puro infierno, de risas de esquina, de paseos a la plaza, al correo. Así crecimos, ventilando todos los trapitos posibles aunque no fuera ni intencional, ni necesario. La gente se aburre, necesita olvidar por un momento la débil y básica vida que se lleva por éstos días... cómo mandarse un vodka tónica al seco, es exactamente igual.

14 de febrero (já)

-oye, feliz 14 de febrero

-no me vengas con eso.

-y porqué no?
-feliz día del amor

-no existe la felicidad concentrada en un solo día
-ni menos el amor para iconizarlo en él.
-feliz día de sandeces sistemáticas.
-nada más.

-hahahahhahahahahaha
-qué pelotudo que sos

-nah

-tienes como las respuestas pregrabadas

-no
-mi mente es rápida.

-no lo suficiente como para notar que te estoy jodiendo

-tú crees que no lo sé?
-no te creo tan pelotuda como para darme un feliz día del amor.

-mi amor

-ojala me amaras
-asi me llevarías a buenos aires aunque sea...

-claro, si te amara quizás

-y si...

-y qué te importa
-no te vas a Perú, acaso?
-buenos aires se olvidó de nosotros

-y acaso no puedo decidir si me dan a elegir?
-de mi, no.

-claro que puedes, pero no tienes opcion

-jamás se ha enterado de mi.

-dije nosotros

-ah bue...

-ni tú, ni yo
-además

-y aun cuando pudiera ir con uds

-que el nosotros no existe

-creo que iría a Perú

-yo no quiero ir contigo
-uds suena a mucha gente

-si fueras sola
-tal vez me gustaría ir con vos
-aunque no puedas decir lo mismo de mi
-en fin...

-yo voy con la gente justa
-tal vez?

-yo voy justo con la gente.

-no dirías que sí de inmediato?

-y si, si fueras sola, me agradaría caminar por Buenos Aires contigo
-y si
-diría que si.

-buenos aires se olvidó de nosotros.

-nunca estuvimos allá.

-de forma tangible, no, claro.

-es solo un recuerdo en todo.
-algún día caminaremos por furia.
-viviremos tal vez... que se yo...
-solo ahí le daré opción que nos olvide.
-no antes, no antes.

-el recuerdo es lo que se olvida
-y ya está olvidado
-nunca fue
-nada
-me espera todo un gran buenos aires
-sólo para mí
-sin rastro alguno.